Cada año Ahlsell entrega 5,5 millones de envíos en Suecia, un volumen considerable con altas demandas en precisión, puntualidad y eficiencia en la logística.
Ahlsell necesitaba una solución que les ayudara a realizar un seguimiento de los activos y utilizar el control automatizado de cargas. La antigua solución de código de barras utilizada por la logística de Ahlsell era lenta y no podía permitir un control suficiente para tales volúmenes. Como resultado, la compañía comenzó a buscar una solución más avanzada que apoyaría altos volúmenes con más precisión y una mayor automatización de los procesos.
Después de usar soluciones internas durante mucho tiempo, Ahlsell optó por probar algo externo. La solución específica RFID que Ahlsell eligió fue suministrada por Vilant e incluyó el hardware, el software y la instalación. La automatización y la eficiencia que este sistema ofrece, facilita el manejo de grandes volúmenes de una manera controlada.
Cada uno de los recipientes de plástico de Ahlsell y estanterías metálicas de almacenamiento están ahora etiquetadas con robustos tags RFID UHF. Las etiquetas RFID unidas a los contenedores de carga de los transportistas contienen un identificador de activos retornables desarrollado por GS1, también llamado un GRAI (Identificador de Devoluciones de Activos Global) que identifica a cada contendor de carga, y hace que sea fácil de seguir y rastrear a nivel individual.
En las puertas de carga, se instalan los lectores RFID y las antenas. Las etiquetas de los contenedores de carga se leen y verifican automáticamente utilizando el software de Vilant. Esto permite el control automático de la carga mediante la identificación de todos los contenedores transportados y su ubicación prevista. Si un transportista con una carga que no le corresponde pasa una puerta RFID, el sistema activará una alarma de sonido fuerte para eliminar cualquier error en la entrega y costos adicionales.
En las pantallas de las puertas, los conductores de los camiones pueden ver la ventana de la puerta de carga basado en el programa de carga automática para cada salida. Los efectos del sistema son significativos. El año pasado Ahlsell envió 110 cajas a destinos equivocados conteniendo paquetes de varios clientes. Desde la implementación del sistema RFID sólo ha habido un error en la entrega. Hoy Ahlsell sabe exactamente cuánto tiempo cada activo ha estado fuera del almacén y si no se devuelve en plazo, los transportistas tienen que reemplazarlos.
"La solución está funcionando muy bien y estimamos que el retorno de la inversión para pagar el nuevo sistema será menor de un año", dice Daniel Johansson, Jefe de Logística en Ahlsell. "El número de errores se ha reducido drásticamente lo que significa que la satisfacción de nuestros clientes ha aumentado y pasamos menos tiempo resolviendo problemas. Además, los contenedores de carga ya no se pierden, así que no tenemos que comprar tantos nuevos como lo hacíamos antes".
Menos errores y un mejor control y visibilidad en consecuencia.
Mayor satisfacción del cliente
Disminución de costos por reclamaciones.
Disminución del coste de la carga con menos errores de entrega.
Menos manipulación manual y trabajo adicional.
Disminución de la pérdida de activos.
Mejor visibilidad y trazabilidad de eventos en curso e históricos.